¿Sexualidad?

En un mundo donde la comunicación entre los seres humanos, es escasa y deficiente a pesar de la tecnología, hoy surge la necesidad de una verdadera comunicación, siendo la base de la misma, la verdad, por entera, sin ocultar ni recortar nada. Es por ello que en al época en que vivimos, donde la relación entre los hombres y las mujeres han cambiado, donde la ignorancia crea fantasmas donde no existen, ese es el motivo por el que hoy elijo este tema «La Sexualidad», donde los tabúes y la desinformación predominan.

Pero ¿qué es sexualidad? Una mirada, una simple sonrisa, y ahí el misterio se desencadena. Si, con una acción simple e inocente, pero misteriosa; luego, las manos se acercan, un abrazo, las caricias comienzan, un beso. Y en nuestro cuerpo comienzan a desencadenarse una serie de factores nerviosos y hormonales, que provocan en nosotros una sensación única e intransferible.

Pero ¿qué es la sexualidad?: es un derecho inalienable del ser humano, una forma integral de expresión y de comunicación con el otro un intercambio de placer y compromiso, donde la vida misma está involucrada. El tema sexualidad a variado a través del tiempo, ya que es parte de una relación socio-cultural, diferentes hechos en el mundo provocaron cambios en dicha relación: guerras, desastres naturales, los cambios económicos actuales donde la mujer debe trabajar a la par del hombre, no solo está involucrada una acción biológica, sino a su vez una acción social, que se debería dar en los derechos igualitarios entre hombres y mujeres, derechos de los que muchos hablan, pero que es difícil integrar a la vida diaria.

Debemos comenzar entonces a hablar que la función sexual no es exclusivamente para la supervivencia humana, sino que a su vez es un factor de placer, y como placer solo el conocimiento acabado sobre el mismo, el compromiso que implica, los riesgos que se corren en él, permite su disfrute real. Por lo tanto, es el placer por excelencia siempre y cuando se tenga conciencia de lo que está haciendo. Sin dicha conciencia los daños pueden ser irreparables: no hablamos solamente del embarazo no deseado, enfermedades de trasmisión sexual, sida; sino también de los daños psicológicos que podemos provocar en la otra persona, cuando nos olvidamos que la misma tiene sentimientos y que los mismos deben ser respetados. A su vez de los prejuicios sociales a los que todos nos hacemos eco, por desconocimiento, disgregando a una persona por tal o cual conducta, cuando en realidad podemos estar equivocados.

Para una real comunicación entre dos seres: el punto básico es la información, dicha información se obtiene en el dialogo entre ambas personas, siendo un factor de importancia en una relación sexual, ya que nadie puede saber de antemano cómo es su pareja; y el otro factor es el tiempo, pues el mismo da confianza a la pareja y refuerza la relación.

Para que ese diálogo se produzca, es necesaria una clara conciencia entre ambos, de que la sinceridad y el diálogo es básico entre ellos. Pero como queremos que las personas dialoguen sobre el tema, cuando muchas veces no saben cómo comenzar o como hablar sobre el mismo, los tabúes de la sociedad no permiten la información mínima necesaria para poder comenzar, a su vez el tabú sexual crea mitos sobre el tema, que damos por verdades absolutas, cuando en la realidad son cuentos absurdos, creados y alimentados muchas veces por el desconocimiento y la desinformación, o por siglos de silencio sobre el tema.

Este artículo está esbozado como una introducción al tema, llevando en si mismo muchas interrogantes para desarrollar y analizar.

Espero en el mismo haber despertado en usted lector, una inquietud sobre el mismo, y encontramos en próximos artículos donde usted y yo desarrollemos el mismo.




Publicado: 20/4/1995; Semanario Opinión

Cuando lo publicaron lo hicieron hasta con el Nro. de cédula