Según Aristóteles la música es el reflejo del estado del alma y nos permite modificar su estado, esto lo vemos estudiando las diferentes personalidades y la música como influencia directa en cuanto al desarrollo de la personalidad y su relación social.
La música es muy usada en el ámbito de la diversión por ejemplo los locales bailables, también la música se utiliza para las reuniones en la cual existe una persona que es la que modera el entorno musical.
En las diferentes religiones la música seria como una especie de llave para introducirse al alma humana y también para invocar a los Dioses por medio de danzas.
La música influyó en las épocas de guerra como en las épocas de paz, en las guerras se utilizaba la música como un incentivo y estimulo, también era una forma de intimidar a los contrarios, por ejemplo hay una danza que se utiliza en los partidos de rugby (que se origina en Nueva Zelanda) que sirve para estimularse a si mismo y a la vez intimidar al contrario del partido, esta danza surgió de las danzas guerreras para intimidar al enemigo.
La música tiene el poder de cambiar la forma de interpretación de una persona, donde una misma escena con diferentes efectos musicales puede cambiar de trágica a cómica.
A través de variadas investigaciones hemos comprobado que la música sirve para rehabilitar a la gente discapacitada y con problemas psicológicos ya que la misma es un medio que le permite al técnico producir efectos regresivos y abrir canales de comunicación que permita recuperar al paciente, siendo la misma una herramienta para medicina.
Entradas
